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viernes, 30 de septiembre de 2011

Aquella divertida y apasionante gincana

¿Recuerdan que hace un tiempo les comenté que me anotaba en la Gincana de El blog de Wendy y La voz de Astarielle?











El reto de los 30 libros - día veintiocho

La consigna del día es: uno que lo haya asustado.

Supongo que con esta consigna se espera que uno ponga aquí el título de un libro de terror. Pues no tengo ninguno. Leí varios libros de terror, terroríficos, pero no han llegado al punto de asustarme mientras los leía. Imagino que tiene que ver con el nivel que cada quien tiene de fabricar los monstruos dentro de la cabeza.

Mis monstruos son más bien de carne y hueso. Por eso voy a elegir algo que puede que a los demás les parezca insólito. Un poco por el género (más realista que de terror), un poco por mi militancia política (es sabido que popularmente hay cosas de las que no se hablan, sobre todo cuando pueden ensuciar aquello que embanderamos).

Pero yo voy a hacer lo que mi conciencia me dicta. Y mi conciencia me dice que no hay cosas de las que no se hablan. Que si no hablamos de esas cosas, es probable que vuelvan a ocurrir. Y yo no quiero que ocurran, porque mis pensamientos políticos son puros y sanos y hay prácticas que repruebo aunque las pongan en marcha los que dijeron pensar como yo. Sé que para muchos de los de mi partido soy "un clavo en el culo". Ni me avergüenzo ni me jacto de ello. Siento si hay quienes piensan que hay que señalar con el dedo cuando lo hacen otros y esconder la mano cuando lo hacen los nuestros. Lo siento porque es una estúpida manera de justificar lo injustificable.

Con semejante prólogo por delante, para este item hoy elijo:

El incendio y las vísperas, de Beatriz Guido.

jueves, 29 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día veintisiete

La consigna del día es: un libro que le regalaron y no le gustó.

Un libro que pasó por mi vida sin pena ni gloria, a pesar de que quien me lo regaló es una persona muy querida:

Retrato en sepia, de Isabel Allende.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día veintiséis

La consigna del día es: un libro que asocie con la música que le gusta.



Un libro que asocio con la música que me gusta bailar:

El sarraceno, de Robert Shea.


martes, 27 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día veinticinco

La consigna del día es: un libro para aprender a perder.

Si hay un libro que me enseñó a perder (y a ganar) ese es:

Tus zonas erróneas, de Dyer Wayne.


lunes, 26 de septiembre de 2011

Piruleta y su idea maravillosa

Piruleta ha tenido una idea genial. Armar un brazalete con el trabajo de las artesanas que se ofrecieran a participar y luego sortearlo entre los seguidores de su blog. Esto le ha tomado un tiempo, claro, porque ha tenido que recibir los dijes por correo desde diferentes puntos geográficos. Yo estoy siguiendo las novedades desde que la idea comenzó y voy sorprendiéndome de las cosas bonitas que van engarzándose a la pulsera y festejando con ella cada paquetito que le llega.
Hoy el brazalete está acabado. Y Piruleta nos invita a participar en el sorteo. Yo no pienso perdérmelo. Ese brazalete está cargado de buenas energías y adonde sea que llegue las llevará consigo para multiplicarlas.
Los invito a visitar el blog y a puntarse en el sorteo haciendo clik en el enlace que está bajo la imagen del sorteo. =)


domingo, 25 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día veinticuatro

La consigna del día es: uno que no le prestaría a nadie.

No soy tan egoísta con los libros como para no prestarlos. Generalmente, vienen y eligen de la biblioteca y se los llevan. La mayoría me los devuelve, algunos no. Entre esos algunos que nunca fueron devueltos (culpa mía por no recordar ni a quién se los presté) he perdido colecciones completas y libros que consideraba muy valiosos. Pero así es la vida; dice el refrán: prestar un libro es perder un amigo, aunque no creo que sea para tanto.

Aún así, los presto. Aún así, ruego encarecidamente que me los devuelvan tal y como yo lo hago cuando me los prestan a mí. 

Si hay un libro de los que habitan mi biblioteca que no prestaría a nadie es:

Rimas, de Gustavo Adolfo Bécquer.

sábado, 24 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día veintitrés

La consigna del día es: uno que quieras volver a leer en la vejez.

Este item me llevó bastante tiempo de pensar qué debía hacer. Me pregunto para qué querría leer un libro en mi vejez, por qué esperar, por qué no hacerlo ahora.  

Posibles respuestas: 
a) porque quiero recordar y mantener fresco algo. (Para lo que supongo que basta mi propia memoria, mi vivencia de hoy.)
b) porque quiero leérselo a alguien, y esa persona no está aún a mi lado, lo estará en mi vejez.
c) porque de hacerlo ahora no descubriría lo que debo descubrir dentro algunos años.

Ahora bien:

Descartada la opción A.  No sé qué podría querer recordar. Estoy convencida de que el olvido es una bendición y que los recuerdos mueren en el momento preciso en que deben morir.

Pero... las otras dos respuestas sí me dan algo para elegir. Ojalá fuese una sola elección, pero no puedo, no me coinciden. De modo que hoy tendrán que aguantarse que mi consigna del día se duplique.

El reto de los 30 libros - día veintidós

La consigna del día es: uno de poemas.

Me gusta la poesía antigua, la de Bécquer, la de García Lorca. De algunos libros de poesía más moderna podría elegir tal vez la mitad de los poemas, pero no recuerdo ningún libro que me haya gustado entero. Y por eso me da pena no poder poner a Gioconda Belli en este item, por ejemplo, porque me gustan muchos de sus poemas de Poemas y otros escritos, pero el libro entero... no sé... y lo mismo me ocurre con Ramón Plaza.
Así que por no caer en los clásicos (que lo merecen pero deben ser mencionados por todos los que hacen este reto), voy a elegir:

Antología del amor, de Julia Prilutsky Farny.

viernes, 23 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día veintiuno

La consigna del día es: un libro de cuentos.

Sin que se me plantee ninguna duda:

Reina negra a rey blanco ¡Jaque!, de Santiago Grimani.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día veinte

La consigna del día es: un libro que te haya sorprendido por malo.

¡Qué compromiso! Sobre todo cuando una trata de convencerse de que no hay libros malos, sino que hay libros para cada quien... como quien dice que para gustos, los colores.

Pero ¿qué es un libro malo?

¿Un libro que hace apología? Como aquel que incendié...
¿Un libro cuyo contenido no me seduce? Como aquel del premio nobel que me provoca sueñito...
¿Un libro cuyo contenido no me sirve ni para divertirme? Como los de Jorge Bucay...

Mi concepto de libro malo es que, para empezar, esté mal escrito. Y esto de mal escrito no apunta solo a que tenga una falta de ortografía o gramatical que puede habérsele pasado al corrector de estilo (aunque habría que asesinarlo igual). Un libro mal escrito es aquel que está mal contado. Aquel en el cual su autor no supo aprovechar los recursos de una historia que pudo ser buena si se hubiese tomado la molestia de trabajarlo. Un libro relleno. Con una historia que pudo contarse en cuatro renglones pero se infló con descripciones que no venían al caso y accesorios y trucos que no alcanzan a darle sustancia. Una historia en la que se cometen errores imperdonables de coordinación o ambientación (cuando su autor ya está supuestamente capacitado para no cometerlos) y encima se vende como si fuesen chocolates al mayoreo.

Con esta definición en la mano puedo decir que un libro que me sorprendió por malo fue:

Ángeles y demonios, de Dan Brown.

Llegaron los marcapáginas de Dragonfly !!!

Esta entrada es para contarles que hoy me llegaron los marcapáginas que gané en el sorteo que realizó Drangonfly hace un tiempito.


Quise sacarles unas fotos con el celular pero me salieron demasiado brillantes y no se puede apreciar lo bonitos que son ni se apreciaban las plumitas de las decoraciones.

Dentro del sobre venían cuatro: uno de Harry Potter, uno de The mortal instruments, uno de Toledo (una panorámica bellísima) y uno del blog de Dragonfly (que por si no lo han visitado está en http://vptdragonfly.blogspot.com/ y se los recomiendo). 
Todos están muy bonitos, pero los que más me han gustado son el de Toledo y el del blog (que tiene la figura tan linda que ella usa en su cabecera). Todo acompañado de una notita de puño y letra que me emocionó mucho...

El reto de los 30 libros - día diecinueve

La consigna del día es: uno que te haya sorprendido por bueno.

Sin dudarlo:

Rosaura a las diez, de Marco Denevi.


No debería haberme sorprendido viniendo de Denevi. Sus cuentos siempre me atraparon y él resulta ser uno de mis escritores admirados. Pero hay una razón para la sorpresa: generalmente cuando un autor es muy prolífico, su obra va creciendo junto con él. 

Esto es que cada libro resulta mejor que el anterior. Y si uno comete el error de comenzar a leerlo desde el libro más nuevo hacia atrás, se desilusiona. Me pasó con muchos autores, por eso lo digo. Y la decepción es grande. Entonces viene un ejercicio para comprender la época, la coyuntura y lo que sea que concluye en lo que dije antes: no es que el primer libro sea malo, es que el autor ha crecido.

Denevi siempre fue de mis favoritos, pero lo que había alcanzado a leer de él era posterior a Rosaura a las diez. Por lo que me daba cierto miedo meterme de cabeza en una novela probablemente hija de su pluma en pleno aprendizaje. Tenía ganas, pero le escapaba... hasta que apareció en casa una colección de suplementos de la revista Selecciones. Se trata de fascículos antiquísimos, de a cuatro o cinco van componiendo un libro entero que se encuaderna dentro de una cajita muy mona. El papel es papel común (ya de un color té aguado por el paso del tiempo), tapas blandas como las de las revistas y con dibujos alegóricos. En el caso de Rosaura a las diez, en el mismo paquete venía Ceremonia secreta, y unos cuentos sueltos y poemas de diferentes autores.
Ahora que la tenía en casa ya no había excusa: tenía que leerla. Aún así me resistí hasta que la vi a mi hija  leyendo los fascículos.

martes, 20 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día dieciocho

La consigna del día es: el libro que más veces has leído.

Así como en la vida uno busca la oreja predispuesta de un amigo cuando tiene una alegría o una pena que compartir, a la hora de releer un libro (por el placer de releerlo o porque no hay ya libros sin leer en la biblioteca) uno recurre a un amigo de las letras para gratificarse.

En mi caso este encuentro se produce dentro de uno de sus libros:

Todos los fuegos el fuego, de Julio Cortázar.

lunes, 19 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día diecisiete

La consigna del día es: uno de este año.

Y para variar, no capto si la consigna apunta a uno editado este año o a uno leído (o releído) este año o a uno comprado este año (tres aspectos que difícilmente coincidan en mi vida, no suelo comprar libros recién salidos del horno y tampoco suelo leerlos de inmediato haberlos comprado; y, además, leo muchos libros prestados).

Digamos que nos decantamos por uno leído este año, ya que no me fijo en el año de edición de los libros cuando los abro (de puro ansiosa por leer el resto). Aunque, siendo sincera, nunca sé en qué día estoy viviendo. O sea que es probable que lo haya leído en diciembre y la memoria me lo corre a enero. Debo confesar que tengo un serio problema de atemporalidad. 

Suponiendo que este año sea el lapso de tiempo que mi cabeza calcula que es este año... y teniendo en cuenta que me leí un montón de libros, voy a elegir de la lista uno que:
- haya leído este año (aunque no fuera por primera vez), que me haya gustado mucho y que sea pasible de recomendación.
Dadas estas condiciones, me quedo con:

El tambor de hojalata, de Günter Grass.

domingo, 18 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día dieciséis

Y ahora sí, el post de hoy... =)

La consigna del día: uno ruso, que sí hayas leído.

Bueno, creo que me leí a todos los rusos obligatorios del secundario (Dostoievsky, Dostoiesvky y Dostoievsky, jejej) ... A Crimen y castigo, creo que llegó un momento en que me lo sabía de memoria... 

Pienso que será mejor elegir uno que no me hayan obligado a leer. Uno que haya leído por voluntad propia.

Y ese es:

La guerra y la paz, de León Tolstoi.

sábado, 17 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día quince

Este post vale por el día de ayer (en que mi internet no funcionaba...)

La consigna del día es: un libro que hayas amado y ahora odies.

No voy a ponerme a explicar lo mismo que ya expliqué. Baste decir que si mis odios son profundos, también lo son mis amores. Por lo tanto voy a redireccionar la consigna igual que lo hice con la anterior (de otro modo no podría cumplirla en absoluto y, así, al menos la cumplo a medias).

Entonces, la consigna del día es: un libro que hayas amado y ames (y sanseacabó).

Un libro que ha sido muy importante en mi vida y creo que por eso siento un profundo amor hacia su contenido es:

Los hijos de Yocasta, de Christiane Olivier.

jueves, 15 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día catorce

La consigna del día es: uno que hayas odiado hace años y hoy admiras.

Recalculando... mis odios suelen ser tan profundos que es prácticamente imposible que varíen hasta el extremo contrario. Si bien uno puede admirar algo que odia, sin amarlo (lo uno no quita lo otro, la admiración no anula el odio y viceversa), la palabra odio tiene otra acepción en mi vocabulario. Las pocas (o muchas, depende de cómo se mida, je) cosas que odio no son admirables para mí. Si las odio es justamente porque me parecen defenestrables y porque es imposible que llegue a aceptarlas sin abdicar a lo más íntimo de mí misma.

Por eso digo: recalculando. Porque a esta consigna voy a tomarla por la mitad. A saber: uno que hayas odiado (y punto).

Si hay un libro que he detestado hasta lo indecible, ese es:

La perfecta casada, de Fray Luis de León.

El reto de los 30 libros - día trece

La consigna del día es: el primero que leíste.

Gran problema recordar el primer libro que leí completo... sé que empecé a leer de muy pequeña y que era bastante voraz. Pero no tengo un registro de algún libro en aquella época. Recuerdo las revistas de historietas (que en casa abundaban) y las Selecciones. Pero no un libro completo en mi infancia. Hay un "El Principito", dedicado por mi tío Horacio, que logró sobrevivir a las inundaciones y al incendio y, actualmente, bastante maltrecho duerme en una bolsa de nylon como un lindo recuerdo en cuya portada puede leerse "para mi sobrina preferida". Pero no recuerdo haberlo leído aunque seguramente lo hice. 
Me da la sensación de que este item del desafío, no se refiere a un libro así. Sino más bien al primer libro que podamos recordar haber leído completo (con detalles de la situación)... y para recordarlo tiene que habernos dejado alguna huella (cosa que El principito nunca hizo por más bonito libro que pueda ser).
Tomando esta idea para la premisa, tengo que mencionar mi primer recuerdo de un libro entero:

El chacal, de Frederic Forsyth. 

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Gran Gincana Literaria en el Blog de Wendy y La voz de Astarielle

Como les conté hace unos días y como podrán ver en la sidebar (ahí, primerito de todos los anuncios) hay Gincana en el blog de Wendy y en la Voz de Astarielle.
Estas dos amigas se han unido para hacernos jugar con sus desafíos semanales y darnos la posibilidad de ganar muchísimos libros. Yo estoy apuntada desde el primer minuto, creo... y ando tras sus pistas para reunir puntos y ver si consigo llegar en los primeros puestos. Espero tener mucha suerte y conseguirlo.
Los invito a clikar sobre el enlace y jugar con Wendy y Astarielle durante todo setiembre.

El reto de los 30 libros - día doce

La consigna del día: una biografía.

El libro elegido para esta consigna es mucho más que una biografía novelada. Es una novela en sí mismo. 

El oro de los Césares, de Julio Torres.

martes, 13 de septiembre de 2011

Otro premio ¡Qué sorpresa!

Este premio tan bonito me fue entregado por Le gran scargot de http://quecuentanlascuentas.blogspot.com/

Un sitio precioso de artesanías del cual me he hecho seguidora (me encantan las cositas que están haciendo los jóvenes y me he decidido a seguir sus creaciones).



Este premio viene acompañado de unas normas.

El reto de los 30 libros - día once

La consigna del día: uno que te haya motivado a visitar algún lugar.

Yo anduve por los caminos de Chiloé, me eché sobre la gramilla protegida solo por grueso poncho de Florián y me quedé viendo el cielo, temblando de deseos de rozarle la mano sin atreverme a hacerlo.


El albergue de las mujeres tristes, de Marcela Serrano, es un libro para soñar. Los paisajes interiores del albergue trazan un plano en cual es fácil moverse, así una sabe dónde está cada una de las "tristes" y no se pierde cuando la autora la lleva de visita hacia alguna de ellas. La infancia de Floreana, su relación con la pareja de la cual acaba de separarse, las confidencias de las "tristes" acerca de sus historias, la realidad en el albergue, las salidas de allí, todo es paisaje. Marcela Serrano es una paisajista de las almas. Por un momento, a una le dan ganas de abrazar a cada una de las habitantes del albergue y sanarle las heridas. 

No solo me hizo soñar con el lugar en el cual se desarrolla la novela, al punto en que fui a la web en busca de paisajes y apuntes geográficos, sino que me motivó a investigar sobre las recetas de cocina que se preparaban y, gracias a este libro, conocí a Loreena MacKennitt. Ese "Tango a Evora", bailado por Florián y Floreana, me motivó a descubrir la música de Loreena (gusto del cual ya no pude desprenderme).
El albergue de las mujeres tristes, es un libro que tiene de todo, romance, psicología, críticas a la sociedad y a la institución familiar de la época, todo con un trasfondo de feminismo que busca unificar criterios con el hombre, que no enfrenta a hombres y mujeres sino que busca explicar y contener los miedos de ambos. 
Llamativamente, el personaje más querible de la historia es el sobrino de Florián, homosexual, sin tapujos, poeta, buen amigo. Recuerdo que cuando leí el libro por primera vez, sentí que a Marcela Serrano se le había escapado eso: una unificación de ambos sexos es la que en el libro grita las verdades. Pero luego, al releerlo, caí en la cuenta de que a Marcela Serrano no se le había escapado nada: lo hizo adrede.

La frase inolvidable: "Cualquier reparación posible pasa por dormir sola".

Algún día, caminaré de verdad por los caminos de Chiloé. 

El albergue de las mujeres tristes es la obra más conocida de Marcela Serrano. Floreana, una historiadora aún más joven y más atractiva de lo que ella misma quiere creer, llega a un albergue muy particular en la isla de Chiloé. Allí, en medio de los paisajes del sur profundo, acuden mujeres diversas para curar las heridas de un dolor común: el desamor de los hombres. Ambivalentes, reprimidos en el sexo, vacilantes en el compromiso amoroso, los hombres sienten miedo frente a la autonomía que las mujeres han ganado. Mientras tanto, en ellas crece la insatisfacción, el «mal femenino» de nuestro tiempo.

domingo, 11 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día diez

La consigna del día: uno con una pésima versión cinematográfica.

Tengo que repetir el comentario de ayer:
1- no soy muy peliculera
2- difícil que una película me guste tanto como un libro

Esto ya se lo pone difícil a cualquiera...


Pero creo que el que se lleva la palma de oro en esta oportunidad y sin tener que sopesarlo mucho es un libro que no es muy bueno, pero su película es mil veces peor:


Desde el jardín, de Jerzy Kosinski.
(Esta portada es posterior a la película, el libro que tengo yo tiene portada blanca)

El libro no es tan malo. Si se lo mira desde la óptica de la psicología del personaje. A mí me pareció más bien un cuento largo en vez de una novela. Está bien narrado, es comprensible y lleva un hilo sencillo de seguir. Como literatura me dejó con ganas de que pasara algo más. Pero, bueno, es un libro para leer en una tardecita, sin muchas pretensiones.
Ahora, la película... es intragable. La psicología a la cual apela el libro, en la película se asemeja a la lentitud. Por razones obvias de la época, en la película se suprimieron escenas del libro que se consideraron fuertes y que tal vez eran importantes para comprender de qué venía la cosa.
Conclusión: no la vuelvo a ver ni que me paguen.

Desde El Jardín, una novelita excelente, narrada con sencillez y encanto, desde la paz que inspira el personaje de Mr. Chance, ese adorable ignorante que ha vivido apartado del mundo toda su vida y que un día tiene que enfrentarse a él. Kosinski construyó un relato sin final aparente, pero con una clara moraleja implícita sobre la simplicidad de aquellos que detentan el poder. Chance es capaz no sólo de sobrevivir, si no de llegar a las más altas esferas de la sociedad hablando de lo único que conoce, su jardín, un discurso que se toma por metafórico y dotado de gran sapiencia por empresarios, políticos, medios de comunicación... Lo mejor de todo es que no media maldad ni engaño por parte de Mr. Chance, el sólo se muestra como es y los demás simplemente, lo ven como desean que fuese. La novela fue adaptada al cine y dicen que todo ocurrió cuando Kosinski recibió un telegrama en el que alguien se hacia pasar por Chance y decía: Estoy disponible dentro o fuera de mi jardín. Se añadía un número de teléfono y Kosinski lo marcó. La persona que contestó fue ni más ni menos que Peter Sellers, quien a la postre protagonizó la exitosa versión cinematográfica. Pero eso es otra historia. Ésta, la del libro, es la de un cuento delicioso e inteligente que se lee en un rato de evasión imaginativa que todo el mundo debiera probar.

El reto de los 30 libros - día nueve

La consigna de día es: uno con una excelente versión cinematográfica

Mmm.. este post da para mucha foto...

Y... qué complicación de consigna...
Es que debo confesarlo:
1- no soy muy peliculera.
2- dificil que una película me guste tanto como un libro.

Hay películas que me gustaron mucho, pero no he leído los libros (y me quedé con las ganas que sé que algún día podré saciar), como es el caso de Mad Max y El Padrino.





Mad Max y El Padrino son películas que me motivaron a ver las siguientes sin mover la cola de la silla (cosa extraña en mí, ya que raramente algo me motiva a ver una película). Pero no leí los libros, por tanto no puedo meterlos dentro de esta categoría sin decir mentiritas  =(.




sábado, 10 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día ocho

La consigna del día: Uno para leer por fragmentos

Apenas leí la consigna, el libro se me apareció en la cabeza. Pero me dije: no, piensa en otro... mejor piensa en otro. Pensé en otros, pensé en "The Matrix o las dos caras de la perversión" de Slajovj Zizek, pensé en "Por qué a mí" de Robin Norwood, pensé en "El infierno" de Dante... pero entre medio de todos esos títulos, volvía a aparecérseme aquel primero...insistente.

Y decidí no buscar más. 

El informe Hite, de Shere Hite, es el libro que merece estar en este apartado, sin lugar a dudas.
¿Por qué? Porque si bien no es un libro para pasar el rato o para entretenerse, es un libro que dice mucho de las mujeres, justamente porque contiene respuestas que muchas mujeres se atrevieron a dar.
Un libro para leer por capítulos, porque es conveniente tener a mano un bloc y una lapicera, e ir respondiendo una misma las preguntas. Un libro que no deberíamos leer solo las mujeres, que deberían leer también los hombres, o tal vez deberíamos leerlo en pareja. 
Yo lo tengo en formato digital y está en la computadora. He dicho a mis hijas que allí está un libro importante que deben leer cuando puedan y sientan ganas de hacerlo. No sé si lo han leído, al menos no las pesqué haciéndolo. A ellas le llama más otro tipo de literatura (convengamos en que son bastante jóvenes aún). 
He pensado en una buena estrategia, en algo que siempre da resultado con los hijos: decirles "ni se les ocurra leer ese libro con nombre de documento del FBI, ese del informe Hite, porque no es para niños y no conviene que lo lean", segurísimo que a los dos días está leído... No sé, tendría que probar si funciona. Lo que sí sé con mucha claridad es que quiero que mis hijas lo lean... lo más pronto posible, fragmento por fragmento, y con lapicera y bloc en la mano.

viernes, 9 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día siete

La consigna del día es: Uno muy divertido

He leído muchos libros divertidos. Porque a mi entender, diversión es pasarlo bien.
Pero hoy voy a tomar el concepto "divertido" para hablar de un libro que realmente me hizo llorar de risa.
El descabellado oficio de ser mujer, de Cristina Wargon.
Todos los libros de Cristina Wargon me hacen morir de risa. Ella, al igual que Gabriela Acher, tienen esa cosa intrínseca que tenemos las mujeres rioplatenses, que somos capaces de reírnos de nosotras mismas y de las situaciones en las que nos involucramos, y con esa risa: desdramatizar la vida. 
El descabellado oficio de ser mujer, llegó a mi vida en un momento de caos. Crisis existencial, balance personal, preguntas sin respuesta que giraban en mi cabeza y acaban siempre en una misma duda ¿por qué a mí?

Cristina me dio la respuesta: porque sos mujer. Después de ese libro, me devoré todos los demás. 

Me sentí muy identificada, compartí las anécdotas sabiendo que a mí también me habían pasado en mayor o en menor medida, y que las que no me habían pasado podían suceder muy pronto.
Una genia esta mujer, para sacar de cada lágrima o cada angustia una sonrisa y una mirada positiva hacia el futuro.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día seis

La consigna del día es: Uno de un Nobel.


No sé si leí muchos libros de nóbeles. Ni siquiera entiendo mucho cuál es el criterio que se tiene en cuenta a la hora de entregar un premio Nobel. 

Pero rebuscando en mi cabeza títulos y autores... logré asociar un título con un autor que se llevó el premio. 
El evangelio según Jesucristo, de José Saramago.
Suelen llamarme mucho la atención los libros relacionados de una u otra forma con puntos de vista respecto de las religiones. Este es una novela. En el total sentido de la palabra. Sus referencias a Jesucristo son más bien históricas, porque el Jesucristo del que habla Saramago "podría" ser el mismo de la Biblia. Sinceramente, siempre soñé con un Jesucristo así, tan humano, tan... tan... tan Jesucristo.
La novela es totalmente ágil, el lenguaje coloquial hace que uno se meta dentro con la misma facilidad con que se lee la misma Biblia. Y el hecho de haberla leído (a la Biblia) previamente, hace que ubicarse en los espacios y en la linea temporal sea muy sencillo, tanto como si estuviera viviéndolo. 
La conversación entre Dios, el Diablo y Jesucristo en el bote, en medio del mar, es imperdible: una exquisitez.
No se puede explicar... hay que leerlo.

El reto de los 30 libros - día cinco

La consigna del día es: Un libro de viajes.

No tengo mucho para decir de este libro. En realidad no es específicamente de viajes. Sino que trata de una persona que hace un gran recorrido. Tal vez por eso fue el primero que se me vino a la memoria. Y aunque el recorrido del protagonista es muy grande en lo real y concreto, en lo geográfico hacia Katmandú, hace un recorrido mucho más grande en lo interior, en lo espiritual.
Flash, de Charles Duchaussois.
Es un libro muy duro. Muy difícil de leer a la edad en que yo lo hice, allá por mis 16 años. Y aunque no lo he vuelto a releer conservo las imágenes nítidas de las descripciones que el autor hace sobre los síntomas, actitudes y escenarios de la droga de la época, las distintas costumbres diferenciadas apenas por las fronteras de los países. Leer Flash fue como verlo en una película, así de hábil es el escritor para hacerlo muy visual ante el lector. Supongo que esa era la intención: que resultase tan real que a nadie se le ocurriera adentrarse un largo camino sin retorno.

lunes, 5 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día cuatro

La consigna del día es: uno que le gusta a todos menos a usted.

Y acá se viene lo terrible. Si los detractores de Poldy no me lapidaron ayer, lo harán hoy los fanáticos de este escritor adorado por al menos tres generaciones de lectores y laureado por cuantas academias y asociaciones de culturales existen. El libro en cuestión es "Cien años de soledad", de Gabriel García Márquez.

Pero bien podría haber elegido al azar cualquiera de sus otras novelas (con todas me pasó lo mismo). Si me quedé con esta, es porque es la que más me costó leer. Si bien reconozco en García Márquez aquello que amo en un escritor: el purismo en la prosa, la delicadeza del lenguaje sostenida a lo largo de páginas y páginas; no consigo meterme en sus paisajes. Sus escenarios y sus protagonistas no me dicen nada, no me siento invitada a participar en sus historias y no logro identificarme con algo que me dé un asidero para imbuírme. No sé si me explico. 

En una noche de insomnio, en la que ya haya probado aliviar el despabile con todos los métodos posibles sin lograr dormirme, la única solución es abrir "Cien años de soledad", no importa dónde... al azar, el inicio, el medio, las páginas finales, da igual... a los veinte renglones estaré durmiendo como un angelito.
Sé que no es políticamente correcto confesar esto. Me ha pasado que, en encuentros de escritores, se me abalanzaran con intención de cortarme la yugular por mencionarlo. Pero es así y no lo puedo negar.
Sin embargo, he leído los "Doce cuentos peregrinos" de GGM, y los adoré, y volví a leerlos muchas veces. "Un rastro de sangre en la nieve" es uno de los cuentos que yo pondría en primer lugar en mi lista de cuentos geniales. 

El reto de los 30 libros - día tres

La consigna del día es: uno que sea un placer culposo.


Sí.... si.. si... lo tengo que confesar... con las mejillas bordó de la vergüencita... ¡He leído a Poldy Bird! Y no sólo la he leído, lo que es peor ¡la he disfrutado hasta las lágrimas! Y peor que eso ¡la he recomendado! Y se la di a leer a mis hijas... Y vuelvo a leerla de vez en cuando...

Ya está, ya he confesado. Ya pueden llevarme al cadalso.
El libro en cuestión se llama "Cuentos para leer sin rimmel". Y todo su contenido es lacrimógeno... y cursi. Pero hay algo que no puede negársele a Poldy: un manejo de la descripción que da envidia, un relatar lo cotidiano, lo que a todos se les escapa como si a ella misma le doliera. Si alguien se anima a torturarse con una sobredosis de cursilería, les aconsejo que se salteen los relatos romanticoides y vayan derecho a "El saquito roto".
Culposo o no. Digan lo que digan los detractores de Poldy, ella llenó un gran espacio en una época importante: las vecinas del barrio, las que no entraban a la biblioteca ni tenían acceso a los "grandes de la literatura" leían sus cuentos en las revistas y esperaban con ansias la siguiente publicación. 
Eso le admiro: la popularidad, la capacidad para entrar en casa y que cada señora lagrimeara recordando sus cuentos mientras lavaba los platos. Ya mí, no me parece poca cosa.

sábado, 3 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día dos

La consigna del día es: uno que se haya demorado mucho en leer.


Tengo un libro que me está llevando la vida. Pero creo que ese no cuenta porque es un libro que hace unos diez años trato de terminar (o de pasar al menos las primeras veinte páginas) y no lo logro, de todas formas voy a decir que su nombre es "A la escucha de las estrellas". Y no puedo decirles el autor, porque lo escondí en algún lado de la casa (no recuerdo cuál) porque no quiero encontrármelo. Si evito cruzármelo es porque sé que, si lo hago, volveré a darle una oportunidad y nuevamente me sentiré defraudada al no poder pasar de media página sin bostezar. 

Así que creo que cuenta para la consigna uno que SI haya leído. Si no no tiene gracia...
Uno que leí con bastante esfuerzo es "Carta de Jesús al Papa", de Fernando Sánchez Dragó.

Me dieron un premio bloguero =)

Confieso que se siente raro. No me lo esperaba y no creo merecerlos (es que son dos, pa colmo). Pero como lo que se recibe de regalo no se discute y en esta casa se acepta todo lo que tengáis para ofrecer... no diré ni pío (no sea que me lo quiten, je.
Ambos premios vienen de la mano de Kokolito y según dicen la cosa funciona así:
Al recibir este:
que como se ve es de lo más simpático, lo paso a otro bloguero/a. Y en esta ocasión, (mi primer pase, qué emoción!!!) quiero dárselo a alguien que me alegra con sus respuestas de correo y que siempre tiene una sonrisa a flor de labios para decir que la vida es bella y vale la pena: para ti, Cris de Historias de una gaviota

El segundo viene con indicaciones:
- Anunciar el premio (hecho)
-Agradecer a quien lo ha dado con link a su blog (hecho)
-Otorgarlo a otros 10 blogs con enlace a estos (hecho)
-Avisar a los ganadores (en dos minutos lo hago, juaz)

El pase en esta ocasión toca a:

Bueno, eso es todo. He repartido obsequios y he sido obsequiada. Espero que a todos les de la misma alegría que me dio a mí.
Un abrazo

viernes, 2 de septiembre de 2011

El reto de los 30 libros - día uno

La consigna del día es: Uno que leyó de una sentada. 


Desireé, de Annemarie Selinko


Generalmente me leo casi todos los libros así. Muchas veces me he quedado sin dormir para terminar de leerme un libro que me parecía superinteresante que no me dejaba cerrarlo para continuar mañana.
Pero si tengo que elegir uno, uno solo... tengo el recuerdo vívido de "Desireé".
A ver si logro conseguir la portada en la web para subirla aquí. Es un libro muy viejo. El ejemplar que llegó a mis manos tenía al menos unos cincuenta años. Las páginas estaban totalmente amarillas y me lo habían regalado en una de esas limpiezas de "cosas que molestan" que los parientes hacen en su casa. Como todo mundo sabe que me fascinan los libros y que no me gusta que los tiren, siempre que eso pasa terminan en mis manos para que me los quede o los distribuya.
Desireé no me atrajo por la portada (es más, creo que no la tenía; al menos no la tiene el día de hoy...), nadie me había hablado del libro y solo ver que era un mamotreto de quichicientas páginas me asustó al principio, porque imaginé que un libro tan viejo no sería demasiado ágil de leer (horrible preconcepto, lo sé).

El reto de los 30 libros

30 libros es un blog creado por Mauricio Montenegro, que nos propone un reto. El ejercicio consiste en recomendar un libro cada día, durante treinta días, siguiendo el esquema propuesto. Pueden hacerlo en los comentarios del blog o en twitter con el hashtag #30libros.
Algunos de los compañeros del taller nos anotamos solo por divertirnos un rato. En mi caso, postearé las respuestas día a día (espero poder cumplir a diario) aquí, y las repostearé por Twitter y Facebook.
Te invito a participar. A mí me pareció muy divertido.
Cliká el enlace y enterate de cómo jugar: http://treintalibros.blogspot.com/

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